Radiadores para Transformadores Eléctricos

Radiadores para Transformadores Eléctricos

Los radiadores para transformadores eléctricos son dispositivos que forman parte del sistema de refrigeración del transformador. Su función principal es disipar el calor generado por las pérdidas eléctricas y magnéticas dentro del transformador, evitando que se sobrecaliente y asegurando su funcionamiento eficiente y seguro.

Radiadores para Transformadores Eléctricos

Tipos de refrigeración en transformadores

Los sistemas de refrigeración pueden variar según el tamaño y la potencia del transformador:

  1. ONAN (Oil Natural, Air Natural):
    • El aceite dentro del transformador circula naturalmente por convección, transfiriendo el calor desde el núcleo y los devanados hacia los radiadores.
    • El aire exterior enfría el aceite que pasa por los radiadores.
  2. ONAF (Oil Natural, Air Forced):
    • Similar al ONAN, pero se utilizan ventiladores para forzar el enfriamiento del aire a través de los radiadores, aumentando la eficiencia.
  3. OFAF (Oil Forced, Air Forced):
    • Se utiliza una bomba para forzar la circulación del aceite y ventiladores para mejorar el enfriamiento del aire, lo que es más eficiente para transformadores de mayor potencia.

Características de los radiadores

  • Material: Generalmente, los radiadores están fabricados de acero o aluminio, ya que estos materiales tienen buena conductividad térmica y resistencia a la corrosión.
  • Diseño: Suelen tener una serie de aletas o tubos que aumentan la superficie de contacto con el aire, mejorando la transferencia de calor.
  • Instalación: Se montan en el exterior del tanque del transformador y pueden ser modulares para facilitar el mantenimiento o la expansión del sistema de refrigeración.

Funcionamiento básico

El aceite caliente del interior del transformador fluye hacia los radiadores, donde se enfría al pasar por los tubos o aletas expuestas al aire. El aceite enfriado luego regresa al tanque del transformador para continuar el ciclo.

Estos radiadores son esenciales para garantizar que el transformador opere dentro de sus límites de temperatura, prolongando la vida útil del equipo y evitando fallas o daños graves.

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