Cómo probar la seguridad de un transformador eléctrico
Los transformadores son dispositivos que cambian la corriente alterna (CA) a corriente continua (CC). Los transformadores se utilizan en sistemas de distribución de energía, subestaciones de energía eléctrica y en la planta de fabricación.
Hay dos formas de probar un transformador: la prueba de carga de amperaje y la prueba de resistencia de aislamiento. La prueba de carga de amperaje se realiza aplicando una carga nominal en un transformador durante un período de tiempo especificado por el fabricante o requerido por la ley. La prueba de resistencia de aislamiento se realiza aplicando un voltaje de CA entre dos puntos en un transformador y midiendo su caída de voltaje de CA en cada devanado con un ohmímetro.
Como funciona un transformador
Los transformadores eléctricos son una parte integral del sistema de distribución de energía. Se utilizan para convertir la electricidad de alto voltaje de las líneas de transmisión a un voltaje más bajo para uso en hogares y negocios. Esto se hace usando un transformador que tiene dos bobinas de alambre, una enrollada alrededor de la otra con una corriente eléctrica que pasa a través de ambas bobinas. La relación del número de vueltas en cada bobina determina cuánta potencia se transfiere de una bobina a otra.
Los componentes principales de los transformadores eléctricos son: Devanado primario, Devanado secundario, Núcleo magnético, Aislamiento, Dispositivos de protección, etc.
En esta sección, exploraremos cómo funcionan los transformadores y qué los hace diferentes entre sí. También analizaremos los métodos de prueba para comprobar el rendimiento y la seguridad de un transformador antes de ponerlo en servicio.
Como saber que funciona el transformador eléctrico
El transformador es una parte importante de un sistema de distribución de energía. El transformador convierte el alto voltaje del sistema de transmisión a un voltaje más bajo para la distribución del lado del cliente. El transformador también tiene una bobina que se utiliza para convertir la energía eléctrica de CA (corriente alterna) a CC (corriente continua).
Este proceso de conversión se llama paso hacia abajo. Los transformadores se clasifican en kilovoltios-amperios (kVA), que es el producto de sus clasificaciones de voltaje y amperaje. Los transformadores con valores nominales de kVA más altos pueden transportar más carga eléctrica, pero son más caros y requieren más espacio. Para comprobar que el transformador tiene la capacidad suficiente, haremos una prueba de carga de amperaje con un multímetro antes de instalarlo en nuestras instalaciones.